Las guerras o invasiones han cambiado de forma. Ya no se hacen a la antigua usanza de lanzarse unos sobre otros, ahora tienen dos partes que se ponen en marcha y, cuando se dan cuenta, están en otras manos.
Primero viene la descapitalización. Animan a gastar sin control, que si prejubilaciones con poca edad, que si aeropuertos en todas las capitales, que si alta velocidad por aquí y por allá… una vez gastado el dinero te ofrecen “ahora que tienes la hipoteca, con lo bien que vas ¡cómprate un coche! Total por poco más al mes” te reunificamos toda la deuda y punto. Primer objetivo cumplido, tienen en su poder todo tu capital.
Luego viene el desfalco. Cuando no puedas pagar te ofrecen un acuerdo, se quedan con todo, te puedes negar a firmarlo, pero tienen sus recursos “¿ves todos los supermercados llenos de comida? Pues cuando queramos los dejamos vacíos” tu les puedes decir que siembras los tomates, pero ellos te recuerdan que tienes obligación de venderlo a una empresa, que controlan ellos, y son los que los ponen en el mercado, al precio que ellos quieren y cuando quieren, para su consumo “Tengo dinero para comprar” dices, que te presta alguien, pero ellos no quieren venderte, desabastecen los mercados y, por mucho que quieras, no puedes comprar nada.
Esto no solo pasa en países, también en ciudades o comarcas. Primero quitan la Universidad a Distancia (ya quitaron Magisterio y están en el proceso de quitar Enfermería, ya verán de aquí a cuatro o cinco años. El primer paso es quitarla de al lado del centro hospitalario, para hacerla más inaccesible a los estudios y estudiantes) luego pasará con los juzgados (se los quieren llevar hace tiempo a Antequera) posteriormente los exámenes para conseguir los permisos de conducir (a Málaga).
No se conforman con que tengamos la única comarca sin una carretera de primer nivel, esa fue la primera excusa, a partir de ahí nos descapitalizan totalmente para que seamos dependientes de otros lugares, cuando lo seamos totalmente seremos sumisos a ellos y entonces habrán conseguido su objetivo. Tendremos que hacer algo pero claro, los políticos han vendido su sillón por un sueldo. Habrá que buscar otra forma de hacerse oír.
Publicado en «La Voz de Ronda» 25/07/2015